'El menú': desafiaríamos un menú de degustación aterrador para comer en este magnífico restaurante

Por Emily Zemler

La industria alimentaria está absolutamente ensartada en The Menu, el nuevo thriller del director de Succession, Mark Mylod. La película pone su mirada en el mundo de la buena mesa centrándose en un restaurante de destino en algún lugar del noroeste del Pacífico que se convierte en el lugar de horrores satíricos. El establecimiento isleño llamado Hawthorn es tan integral para la historia que el diseñador de producción Ethan Tobman lo diseñó y construyó casi en su totalidad en Savannah, Georgia. La mayor parte de la acción de la película, que sigue a un grupo de comensales que se deleitan con un menú de degustación cada vez más caótico del chef Slowik (Ralph Fiennes), se desarrolla entre las paredes del comedor y la cocina.

Anya Taylor-Joy y Nicholas Hoult interpretan a una pareja que cena en un restaurante lujoso y algo espeluznante.

"Siempre bromeo sobre esto porque es similar a cuando diseñé la película Room, que tiene un escenario tan icónico y singular en el que te quedas atrapado", le dice Tobman a AD. "Es similar en algunas formas narrativas a The Menu". El guión sólo daba una frase sobre cómo debería verse el restaurante: austero, vagamente escandinavo, frío. “Inmediatamente tuve algunas ideas sobre cómo quería diseñarlo. Llegué a la primera reunión con unas 15 fotografías de referencia y todas terminaron en la película”.

Esas fotografías de referencia incluían pinturas de Francis Bacon y John Currin, que son “estudios sobre lo grotesco, el exceso y la adoración”, así como imágenes de episodios de Chef's Table de Netflix. Una vez que Tobman se dio cuenta de que la mayoría de los restaurantes tienen un estilo relativamente soso y que el diseño interior ocupa un segundo lugar después de la comida, comenzó a ampliar sus referencias. Observó sinagogas e iglesias, particularmente las modernas del brutalismo de los años 60, e incluso incorporó una cruz en la arquitectura de la pared trasera de la cocina para amplificar la sensación de que Slowik está siendo deificado. La personalidad distante y arrogante del chef es evidente en todo el diseño, que es relativamente austero.

El diseño de Hawthorn puede ser elegante y hermoso, pero también transmite una sensación de frialdad y aprensión.

"Queríamos que pareciera que Chef tomó los elementos de la isla en la construcción del espacio", dice Tobman. “Así que, en teoría, cada material que ves en ese restaurante ha sido cosechado de los recursos naturales de la isla, tal como supuestamente lo hace en toda su comida. El problema con Slowik es que es tan fascista en su enfoque para controlar los elementos que ha torcido y doblado la naturaleza hasta el punto de pervertirla”. Al final, en el restaurante no hay nada parecido a la isla. Se ha vuelto frío, asimétrico e incómodo, al tiempo que conserva una sensación distante de perfección.

El exterior de Hawthorn incorpora elementos de la isla en su diseño, que tiene una sensibilidad escandinava.

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Mientras el equipo construía el exterior de Hawthorn en Hampton Island, Georgia, y el interior en un estudio de sonido, Tobman quería incorporar elementos de restaurantes del mundo real. En todo Hawthorn se pueden ver indicios del restaurante sueco Fäviken, ahora cerrado, el restaurante catalán El Bulli, Sonoma, California, el restaurante French Laundry, Alinea de Chicago y el restaurante Noma de Copenhague. El famoso especiero retroiluminado de El Bulli se recreó con gran detalle, mientras que el jardín de French Laundry inspiró el huerto.

El especiero retroiluminado de la cocina de Hawthorn se inspiró en el especiero de la vida real de El Bulli.

Una de las réplicas a pequeña escala de Hawthorn de Tobman.

Tobman también trabajó en estrecha colaboración con Dominique Crenn, el chef con tres estrellas Michelin del restaurante Atelier Crenn de San Francisco, quien fue consultor de la película. Al hablar con Crenn y su equipo, rápidamente se hizo evidente que la cocina de Hawthorn tenía que funcionar realmente para que la acción de la película pareciera fluida y auténtica. Tobman compró electrodomésticos de cocina que funcionan para la construcción del decorado interior y adquirió una estufa de llama abierta hecha a medida de la empresa Grills by Demant de Savannah después de ver una similar en el restaurante local Common Thread. Aunque la cocina es un poco más grande que la típica cocina de un restaurante, es notablemente realista.

De hecho, Crenn quedó tan impresionada con la escenografía de Tobman que lo contrató para rediseñar Atelier Crenn, cuya inauguración se espera para finales de enero. “Es una verdadera historia de 'el arte imita la vida, imita el arte'”, dice Tobman. "Pero si puedo conseguir una mesa de vez en cuando, puede que valga la pena..."

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La cocina del restaurante fue diseñada para evocar una iglesia, con una sutil cruz en la pared del fondo. Todos los electrodomésticos realmente funcionaron, por lo que podría parecer que el elenco estaba preparando los platos en tiempo real.

A diferencia de Atelier Crenn, en Hawthorn aguardan horrores. Entonces, aunque el restaurante tiene una calidad aspiracional, con mesas y sillas hechas a medida, también hay una sensación persistente de inquietud inherente a la construcción. La enorme puerta del restaurante, que se abre y se cierra, insinúa lo que vendrá de la trama teñida de terror. Tobman se inspiró para crear la pesada puerta en una experiencia en un spa en Utah.

El comedor del restaurante fue cuidadosamente preparado para la acción de la película. Las mesas y sillas se construyeron a medida y el intrincado techo se inspiró en los jardines zen japoneses.

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“Todos hemos tenido ese momento en el que entramos a una habitación y tenemos ese extraño momento de lucha o huida de: '¿Debería haber entrado aquí?'”, dice Tobman. “Había una puerta muy grande que hizo demasiado esfuerzo para cerrarse sobre un eje central y se cerró de golpe demasiado fuerte. Pensé: Dios mío, voy a morir”. La característica arquitectónica premonitoria fue la manera perfecta de transmitir esta sensación de miedo a la audiencia. "Quieres que sientan la arquitectura emocionalmente".

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Al igual que la cocina, el ahumadero evoca una iglesia. El edificio se inspiró en el proceso de secado de Fäviken, el antiguo restaurante de Magnus Nilsson en Suecia, aunque no parece similar en estilo.